Miguel González |
martes, 25 de noviembre de 2008 |
El Sevilla la Nueva perdió 2-0 en el mítico campo de la Mina frente al Real Carabanchel, en un partido en el que los de Miguel Ángel Lobón pagaron una vez más el difícil juego al que obliga un campo de tierra. Sin poder llevar la iniciativa en ningún momento no fueron capaces de crear demasiadas ocasiones. La mejor, un penalti poco antes del descanso que fue atajado por el portero local.
El Carabanchel empezó dominando desde el principio a un rival incapaz de asentarse en otra superficie que no sea césped artificial. Tal fue el dominio que en el minuto 8 ya se adelantaron los locales. Mediada la primera parte un jugador sevillanovense fue expulsado por recriminarle algo al árbitro, lo que facilitó aún más las cosas al Carabanchel. No desaprovecharon su oportunidad y marcaron el 2-0. Con el partido muy cuesta arriba el Sevilla la Nueva fue capaz de crear una jugada de peligro que acabó en penalti y expulsión de un jugador del Cara. El portero lo detuvo y echó por tierra las esperanzas de los visitantes para meterse en el partido.
En la segunda parte los dos equipos notaron el cansancio por jugar con diez jugadores y fueron incapaces de crear peligro. Esta derrota deja en situación peligrosa al Sevilla la Nueva, que se enfrentó a un rival directo y termina la jornada justo por encima de las posiciones de descenso.
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